El VIX es un índice americano que mantiene una estrecha correlación con el S&P 500, por lo cual se convierte en una posible herramienta para el desarrollo de sistemas de trading en contratendencia.

En el número de Julio de Hispatrading Magazine, Sergio Nozal nos presen-taba un interesante artículo sobre el Chicago Board Options Exchange Market Volatility Index o más conocido como VIX. En este artículo explicaba la naturaleza del índice y cómo podía ser utilizado en nuestra operativa en los mercados.

Para aquellos que todavía no conozcan este índice, el VIX fue creado por el mercado de opciones de Chicago (CBOE) en 1993 y se calcula en base a la volatilidad implícita de las opciones del índice S&P500 sobre un periodo de 30 días.

El VIX es conocido de manera informal como el “indicador del miedo del inversor” y refleja con bastante exactitud el sentimiento del mercado. Al ser una herramienta utilizada por muchos inversores para cubrir posiciones (comprando opciones PUT) cuando sospechan que el mercado puede sufrir un retroceso, el índice sube al aumentar dicho miedo y baja al disminuir este. Por tanto, marca con claridad el miedo a la caída.

En el artículo de hoy veremos el diseño de un sistema contratendencia sobre el VIX y cómo podemos utilizar este sistema para beneficiarnos de la información que nos proporciona.

Un sistema contratendencia sobre el VIX

A la hora de hablar de sistemas automáticos de trading, la gente está más acostumbrada a tratar con sistemas que operan a favor de la tendencia. Los sistemas contratendencia, a diferencia de los seguidores de tendencia, buscan encontrar los giros de mercado, intentando anticiparse a las nuevas tendencias y, aunque no son tan populares, también pueden resultar rentables a largo plazo.

Por eso hoy os he querido traer un ejemplo de este tipo de sistemas ejecutado sobre el VIX. Mi objetivo será intentar explicar la lógica del sistema paso a paso, de forma que se entienda claramente el objetivo de cada uno de los elementos que lo componen.

Paso 1: Calcular la relación entre el S&P500 y VIX.

El núcleo de este sistema se basa en la entrada a contratendencia sobre la relación existente entre el S&P 500 y el VIX. La relación entre estos dos índices viene dada por su cociente:
relación = Precio S&P 500 / Precio VIX
de tal forma que la variable “relación” aumentará de valor cuando el S&P500 ascienda o el VIX descienda, y disminuirá su valor cuando el S&P500 descienda o el VIX ascienda.

Paso 2: Detectar un exceso en dicha relación

Al ser un sistema operado en un marco temporal diario, podríamos considerar una media móvil de 20 periodos como un valor razonable de nuestra relación entre los dos índices. Cuando la variable “relación” cruza por encima de su media, indica que la relación ha aumentado de valor más de de lo normal (S&P 500 ascendente o VIX descendente) y ese es el momento que el sistema decide entrar a contratendencia. En vez de operar a favor de una tendencia descendente del VIX, el sistema considera que el VIX debería volver a su media y por tanto apuesta por los largos en el VIX.

De igual manera, cuando la variable “relación” cruza por debajo de su media, indica que esa relación ha disminuido de valor más de de lo normal (S&P 500 descendente o VIX ascendente) y ese es el momento que el sistema entra a contratendencia. En vez de operar a favor de una tendencia ascendente del VIX, el sistema apuesta por los cortos en el VIX.

Paso 3: Filtrar las operaciones del sistema

Los sistemas contratendencia deben ajustar muy bien sus condiciones de entrada, ya que en caso contrario, están condenados al fracaso. Este sistema no es una excepción.

Para intentar determinar qué operaciones, de las generadas por las condiciones anteriores, tienen posibilidades reales de cerrarse con beneficios, debemos entender la naturaleza del VIX.

El filtro que aplicaremos para nuestras entradas vendrá dado por los niveles del VIX. 

Cuando el VIX se encuentre en niveles altos, permitiremos las operaciones de venta sobre este y cuando se encuentre en niveles bajos, permitiremos las operaciones de compra.

El problema consiste en determinar cuando el VIX se encuentra en un nivel alto (y por tanto candidato a cortos) y cuándo en un nivel bajo (y por tanto candidato a largos), ya que estos niveles dependerán en gran medida de la situación actual de los mercados.

Para intentar determinar esos rangos, me ayudaré de las bandas de Bollinger. Cuando el índice se encuentre cerca de la banda superior, podremos pensar que se encuentra en un nivel alto y viceversa, cuando se encuentre cerca de la banda inferior, pensaremos que se encuentra en un nivel bajo.

Sin embargo, la forma que tiene el VIX de formar techos y suelos es completamente distinta. Los techos suelen ser más violentos, con formaciones en “V”, mientras que los suelos suelen ser más redondeados, por eso los niveles que contemplaré para el filtrado de las operaciones de compra y venta serán distintos.

Las operaciones bajistas sobre el VIX estarán permitidas cuando el precio se encuentre en la franja correspondiente al 5% superior de las bandas de Bollinger o por encima de ella. Las operaciones alcistas tienen algo más de margen y estarán permitidas cuando el precio se encuentre en la franja correspondiente al 25% inferior de las bandas de Bolliger o por debajo de ella. En el gráfico de la Figura 1 se puede observar el comportamiento de este filtro.

Paso 4: Establecer unos límites máximos de pérdidas

Si ejecutase un backtest del sistema sobre los últimos 10 años tal y como lo he diseñado hasta el momento, podríamos ver cómo, debido a la propia naturaleza del VIX (que sufre grandes variaciones en su precio en cortos espacios temporales), el sistema obtiene beneficios pero también soporta operaciones con grandes pérdidas. El siguiente gráfico del “Max adverse Excursion” pone en evidencia este hecho.

 

Para mitigar este problema, estableceré unos stoploss iniciales a un 20% del precio de entrada. Ciertamente el porcentaje es alto, pero debemos tener en cuenta que el producto que estamos tratando se mueve rápidamente en esos entornos y además es el porcentaje que el gráfico está señalando como frontera de nuestras operaciones ganadoras.

Así pues, después de situar los stops de pérdidas en el sistema, podríamos ver cómo se consigue el efecto deseado al reducir el drawdown del sistema en más de la mitad y aumentar las ganancias netas del mismo.

Paso 5: Resultados del sistema

Los resultados obtenidos al ejecutar el sistema sobre el histórico de los 10 últimos años del VIX, partiendo de un capital inicial de 10.000 $, dimensionando las operaciones para arriesgar un 2% del capital actual y considerando unas comisiones del 0,1% y un deslizamiento del 0,1% . Ver Figura 3.

 

Conclusión

Como muchos podrán estar pensando en este momento, este sistema no deja de ser un modelo teórico de un sencillo sistema contratendencia, ya que el VIX es un índice estadístico creado por el CBOE y por tanto no es operable como tal.

Sin embargo, la idea que se esconde tras el sistema, podría servir de base a sistemas sobre el futuro del VIX o incluso a sistemas sobre el S&P500, si nos aprovechamos de la correlación negativa que encontramos la mayoría del tiempo entre el S&P500 y el VIX y que queda reflejada en el gráfico de la Figura 4.

Espero que este sencillo ejemplo de sistema sobre el VIX sirva para entender la esencia de los sistemas de contratendencia y cómo estos pueden ser una opción interesante a la hora de considerar nuevos sistemas a incluir en nuestra cartera como medida para aumentar su diversificación.