Errores Habituales en la Operativa
Detectar a tiempo errores frecuentes tales como las expectativas irreales que se esperan de hacer trading y la frecuencia de negociación, entre otros, pueden evitarnos acabar con buena parte o todo el capital destinado a la inversión.
Hace poco tiempo tuve noticias de un buen amigo que había fracasado en el trading. Era un experimentado operador intradía que durante 16 años había trabajado en el e-mini S&P 500; pero, en esta ocasión, no sólo falló al cerrar posiciones perdedoras al final de la sesión, sino que siguió añadiendo posiciones, hasta que se quedó finalmente sin garantías en su cuenta. Esta noticia se sumó a mi ya de por sí bajo estado de ánimo- inducido por el hecho de que dos estudiantes también habían caído recientemente en el mercado. La idea, con este artículo, es evitar que al menos algunos lectores vuelvan a repetir estos errores. En este número hablaremos de “Errores Habituales en la Operativa”, aunque también veremos después algunos no tan comunes.
Comencemos revisando las “expectativas poco realistas”.
Un participante de uno de los seminarios gratuitos de Sídney escribió lo siguiente:
“La industria del trading es probablemente la mejor industria para los “charlatanes”. Ser capaz de encontrar un auténtico mentor / entrenador es como “ buscar una aguja en un pajar”.
Estoy de acuerdo con el autor. Pero la publicidad es sólo un lado de la ecuación. Antes de continuar, permítanme ser muy claro; estoy en contra de cualquier tipo de fraude, de modo que nada de lo que digo aquí debe ser tomado como una disculpa por algunas de las prácticas que se disfrazan bajo el nombre de “educación en el trading”. Habiendo dicho esto, los operadores deben tener en cuenta que las prácticas probablemente no existirían, si no participáramos en ellas.
Todos hemos visto los anuncios prometiendo riquezas incalculables dedicando sólo 15 minutos al día. Algunos de los más descarados tendrán escenas de coches de lujo, mucho dinero en efectivo, un ático o dos y a veces ¡hasta una isla tropical! En el mejor de los casos, los sistemas serán el resultado de inocentes ajustes de curvas de beneficios y en el peor de ellos, serán el resultado de cifras fraudulentas. Pero como regla general, a los promotores no les importará demasiado llenarse los bolsillos con el dinero duramente ganado por aquellos que están hartos de su entorno de trabajo actual o que simplemente están desesperados por ganar algo de dinero o recuperar sus pérdidas.
El primero de los errores más habituales es nuestra parte de esta ecuación del promotor: nuestras expectativas son poco realistas.
Queremos creer que hay un Santo Grial – un sistema mágico que (y cito de un asistente a un seminario de Singapur):
• ‘generará muchos dólares,
• habrá pocas o ninguna pérdida,
• implicará poco esfuerzo y
• costará poco comprarlo ‘
Existe una razón por la que se cree en esta estupidez tanto en la profesión de trader como en algunas otras.
Si yo le dijera que podría formarle para ser un abogado de primera (o un cirujano, arquitecto, etc.) y obtener un ingreso de millones de dólares, y que no tendría que realizar un gran esfuerzo, ni invertir tiempo ni dinero, pocos me creerían. Sin embargo, en el trading, muchos creen que no sólo es posible, sino que tienen derecho a ello. ¡Después se quejan de que les han estafado!
Pero la naturaleza del trading constituye una base para esta creencia – por lo menos hasta que pensamos con detenimiento en ello.
La naturaleza del trading -que es un juego de probabilidad- significa que para cualquier operación, un “principiante con suerte” puede ganar dinero, mientras que un “profesional” lo pierde. El mercado puede incluso ser tan amable de ampliar la “suerte” en más de una operación. Pero tarde o temprano, la “suerte del principiante” se acabará y el mercado pondrá tanto al principiante como al profesional en el lugar que se merecen.
Existe otro aspecto del juego de probabilidad que debo mencionar: toda la experiencia en el mundo no le protegerá de las terribles consecuencias de un error de juicio – sean testigos del destino de mi amigo.
Por último, en este campo de las expectativas poco realistas, existe otro aspecto adicional que quiero desmitificar: la idea de que si un tutor es bueno en el trading, no cobrará por la educación que ha adquirido con tanto esfuerzo. En la base de este argumento existe un concepto erróneo sobre la naturaleza de ganar dinero. La mejor expresión de mi visión sobre el dinero se encuentra en La Rebelión de Atlas: véase el discurso de D’Anconia.
Si un educador quiere transmitir sus conocimientos de forma gratuita, esa es su elección. Es una cuestión muy diferente para alguien que demanda el conocimiento como si tuviera derecho a él. Termino este apartado con una observación sobre las creencias acerca de la formación gratuita en el trading:
“Lo bueno no es gratuito, lo gratuito no es bueno “
Así que si un educador cobra una suma considerable, no puede ser bueno en el trading, y si no cobra nada, entonces la educación que ofrece no puede ser buena. Hmm… ¿qué nos dice esto de la forma de pensar del estudiante?
Pasamos a examinar la idea de que una “buena psicología” es la panacea para el éxito en el trading.
A menudo me piden que identifique alguna razón psicológica que haya detectado en el fracaso de los traders. Más a menudo de lo que pensamos, es cierta la percepción de que el “problema” tiene que ver con algo del futuro predeterminado del trader. Sin embargo, parece que asumimos que todo lo que se necesita para tener éxito es identificar este problema – resuelva esto y todos los problemas se resolverán solos. Pero lo cierto es que no es tan sencillo.
Para lograr el éxito todavía tenemos que desarrollar nuestras reglas de gestión del riesgo, así como una filosofía y un conjunto de reglas de trading. Los aspectos psicológicos aparecen cuando tenemos nuestras reglas y nos damos cuenta de que somos incapaces de ejecutarlas con cierto grado de coherencia. Por otra parte, nuestra psicología puede ser la mejor del mundo, pero sin la gestión monetaria y las reglas de trading no tendremos éxito.
Ese es el quid de la cuestión.
Mis operaciones más o menos recientes son un buen ejemplo. Y es que en 2009 tuve mi peor racha de pérdidas desde 1990. Sigo ciertos procesos cada vez que estoy decaído – que van desde la reducción del tamaño de las posiciones a dejar de operar durante ‘x’ días. La idea es quitarnos presión de encima. Sé que con el tiempo, saldré del bache y pasaré a un estado normal o de fluidez; mi trabajo como trader es sobrevivir a esos malos momentos con la mayor cantidad de dinero posible en la cuenta.
Mi operativa implica salir de las posiciones antes de que mi stop sea ejecutado. Ello a veces significa que tendré que salir y volver a entrar porque el mercado me ha echado sin alcanzar el stop. Esto sucedió en esa época con un corto que abrí en el ES U9 a 996.75 puntos. Después de haber cerrado la posición el jueves, el mercado abrió con hueco a la baja al día siguiente.
Mi forma de operar me indica cuándo y dónde iba a volver a entrar, pero también define la colocación del stop inicial. Mis reglas de gestión monetaria definen el tamaño de la posición y aseguran que el beneficio potencial justifique el riesgo asumido; por último, las herramientas y reglas psicológicas garantizan que ejecutaré las operaciones de acuerdo con mis reglas.
El éxito en el trading proviene de la interacción de los tres factores de éxito y no de concentrarse sólo en uno de ellos.
Hasta el momento he sugerido que los errores más comunes son:
1. Las expectativas poco realistas que los novatos traen consigo.
2. La incapacidad para apreciar que el éxito en el trading se basa en la triple base de Psicología x Gestión de Riesgo x Estrategia de Trading. El grado de nuestro éxito se rige por el más débil de los tres elementos.
Por último me gustaría analizar el exceso operativo u over-trading. Este se puede manifestar de dos maneras:
- La frecuencia de negociación: realizamos demasiadas operaciones, saltándonos las reglas de nuestra estrategia.
- La cantidad arriesgada en relación a nuestro capital: estamos sobreoperando cuando el tamaño de nuestra posición amenaza nuestra cuenta con riesgo de ruina.
La frecuencia de negociación supone que en primer lugar, tenemos algún tipo de estrategia y que se han desarrollado algunas reglas para aplicarla. Y, en segundo lugar, ejecutamos las operaciones violando dichas normas – realizamos operaciones fuera de las reglas.
En mi experiencia, los novatos en general sobreoperan como respuesta a una pérdida mayor de lo esperado o cuando se enfrentan a una serie de pérdidas consecutivas a pesar de que han estado siguiendo sus reglas. El deseo de recuperar una pérdida rápidamente por lo general conduce al primer error; el segundo tiende a ser impulsado por un sentido de ‘justicia’: “¿por qué no estoy siendo recompensado si he sido tan bueno”?
Para hacer frente a este problema, primero tenemos que desarrollar un conjunto de reglas de trading y de gestión del riesgo. Entonces tenemos que reconocer que el trading es un juego de probabilidad y, como tal, habrá momentos en que las reglas y el entorno de mercado no coincidan (es lo que denomino estado de decaimiento).
En esas condiciones, tenemos que reducir el tamaño “normal” de nuestras posiciones, el riesgo por operación y la frecuencia de las operaciones (esto último se logra mediante el uso de sólo los patrones más sólidos). Habrá momentos en que nuestra metodología y las condiciones del mercado se ajusten perfectamente (lo que yo llamo el estado de fluidez). En esas condiciones no podemos equivocarnos; y en el estado de fluidez, puedo aumentar el tamaño “normal” de las posiciones y el riesgo por operación.
[No quiero dar la impresión de que estamos en el estado de decaimiento o de fluidez. Se trata de casos extremos. Por lo general, estaremos en algún punto entre ambos – algunas ganancias, algunas pérdidas. En resumen, solemos estar en un estado normal].
Con el reconocimiento de la naturaleza probabilística del mercado, adoptaremos un Proceso de Gestión de Riesgos. Al abrir las operaciones únicamente de acuerdo con nuestras reglas y adoptando dicho proceso, nos aseguraremos de que el exceso de operaciones no termine expulsándonos del trading.