¿Trading discrecional o automatizado? José María del Real nos habla de su experiencia al comenzar a hacer trading y los motivos que le llevaron a decantarse por el uso de sistemas a automatizados para la gestión

Cuando me acerqué al mundo del trading lo hice, como casi todos, de forma discrecional, decidiendo yo mismo qué era lo que había que hacer en cada momento en base a mi intuición y a la información que podía recabar sobre los mercados. Esto fue a finales de los 90, cuando era muy fácil ganar en bolsa. Como yo operaba sólo largo, ganaba como todos, pero me di cuenta de que el trading discrecional no era lo mío, necesitaba tener algo más sólido.

Empecé a recopilar gráficos del Ibex en barras de 5 minutos recortados del diario Cinco Días para analizarlos. En esa época internet en España estaba en pañales y no era fácil conseguir datos, todavía se veía en las salas de trading de los brokers gente con papel milimetrado dibujando sus propios gráficos. Mi primer sistema fue comprar cuando la primera barra de cinco minutos del día fuera alcista y vender cuando fuera bajista. Para averiguar cuáles eran el objetivo y el stop óptimo, un amigo informático diseñó un programa en el que se introducían a mano los recorridos al alza y a la baja de la cotización después de la primera barra. Este programa, al que llamamos MarMax (Márgenes Maximizadores), averiguaba con esos datos cuáles eran el objetivo y el stop más eficientes. Fue mi primera optimización, bastante burda, pero optimización al fin y al cabo. Por cierto, este sistema no funciona, pueden ahorrarse probarlo. Si hubiera podido testearlo en un periodo mayor lo habría descartado, pero mi arsenal de gráficos del Cinco Días en ese momento era limitado. Por suerte no me ocasionó muchas pérdidas.

Después de este estreno tan poco glamouroso en el trading automático, pueden imaginarse lo que supuso para mí descubrir el Visual Chart a principios de siglo. El acceso a datos bastante fiables en cualquier compresión sobre multitud de activos, la posibilidad de programar casi cualquier sistema que se me ocurriese y optimizarlo fácilmente me abrió un nuevo mundo lleno de posibilidades.

PRINCIPALES VENTAJAS DEL TRADING AUTOMÁTICO

Optimización

Cuando un trader discrecional trabaja con una determinada estrategia, suele utilizar los indicadores con los parámetros que ha escuchado que mejor funcionan, o con los que vienen por defecto en la plataforma, pero no sabe exactamente cuáles son los que mejor se adaptan a su forma de operar. Si en su operativa sólo utiliza un parámetro, como por ejemplo el periodo de una media, podría tantear a ojo cuál sería el mejor para su operativa, pero con más de un parámetro las combinaciones se multiplican y es imposible hacerlo correctamente sin automatizar el sistema.

Disponer de unas estadísticas históricas

Un trader automático sabe exactamente qué puede esperar de sus sistemas y, lo que es más importante, qué tiene que pasar para considerar que han dejado de funcionar y hay que abandonarlos. En ese sentido, un trader discrecional opera casi a ciegas.

Posibilidad de diversificación

El hecho de no tener que estar pendiente del gráfico todo el tiempo permite tener funcionando varios sistemas simultáneamente, lo que es imprescindible para conseguir resultados consistentes, como comentaré más adelante.

Dejar a un lado la intuición

Para la mayoría de los traders, la intuición es un mal aliado a la hora de operar, dejarla fuera de la toma de decisiones es una gran ventaja.

INCONVENIENTES DEL TRADING AUOMÁTICO

Dejar a un lado la intuición

Sé que acabo de comentarlo como ventaja, y para la mayoría de los traders lo es, pero hay un pequeño porcentaje (no creo que llegue al 5%) de personas capaces de interpretar el mercado correctamente y “predecir” el movimiento de los mercados. Si eres uno de estos traders tocado por la mano de Dios, tienes que aprovecharlo y olvidarte del trading automático.

Los sistemas caducan

Muchos de los que se inician en el trading automático imaginan (y no se equivocan) que es difícil encontrar un sistema que funcione, pero que una vez que lo logren habrán encontrado la gallina de los huevos de oro, y podrán dedicarse a vivir de ese sistema vigilando la operativa remotamente desde la playa o el campo de golf. Por desgracia no es así, todos los sistemas intradiarios con buenos ratios caducan tarde o temprano. Si hacemos bien nuestro trabajo y tenemos un poco de suerte, podremos encontrar sistemas que, una vez puestos en real, sigan funcionando durante unos cuantos meses o años. Por mi experiencia y la de muchos traders que conozco, es raro el sistema que aguante más de 5 años con buenos ratios. Por lo tanto, para un trader automático es imprescindible estar continuamente desarrollando nuevos sistemas para tener siempre algunos de reserva. Porque si dejan de funcionar todos los sistemas que tenemos operando nos quedamos sin trabajo y sin ingresos.

Nota: en realidad, sí que conozco sistemas que han funcionado más allá de esos cinco años, pero suelen ser en barras diarias y con pobres ratios.

El peligro de la sobreoptimización

Nunca puede evitarse al 100%, pero podemos reducirla mucho dejando periodos fuera de optimización y exigiendo un mínimo de operaciones por tramo. Yo además recomiendo dejar los sistemas en cuarentena una vez terminado el análisis: si el sistema la pasa sin que empeoren sus ratios, podemos estar casi seguros de no estar sobreoptimizando.

No hay sistemas perfectos

Un error bastante común entre los que se inician en el trading automático es intentar conseguir un sistema casi perfecto, donde la gran mayoría de las operaciones sean ganadoras, y con un drawdown anecdótico. Es mejor no perder el tiempo buscándolos, porque no existen. Los hay malos (la grandísima mayoría de los que vas a encontrar), mediocres (con trabajo encontrarás unos cuantos) y buenos (puede que no los encuentres nunca, pero no pasa nada, sigue leyendo). Por suerte, la posibilidad de diversificación del trading automático permite sobrevivir incluso sin encontrar ningún sistema bueno. Unos cuantos sistemas mediocres descorrelacionados generan una estrategia mucho más consistente que un buen sistema aislado. Las sinergias entre sistemas suelen ser muy valiosas y hay que aprovecharlas.

En relación a esto último, estoy colaborando con un grupo de empresarios madrileños que van a sacar adelante un proyecto que he tenido en mente los últimos años: crear un Fondo de Inversión Libre multiestrategia que reúna la operativa de varios traders descorrelacionados. Nuestro objetivo es conseguir unos resultados mucho más consistentes que los que obtendría un solo gestor, reduciendo al máximo el drawdown y la volatilidad. En el próximo número de Hispatrading espero poder contarles detalles de este proyecto, en el que estoy doblemente ilusionado porque además van a participar como traders dos alumnos míos.